LA ASFIXIANTE CARGA DEL ESTADO

1/  Cuando la sociedad civil es obligada a soportar el peso de una burocracia enorme, mal remunerada, sin motivación e ineficiente, es muy difícil, por no decir imposible, disminuir presupuestos y déficit. y a ello cabe agregar el costo de una seguridad social   permanentemente jaqueada por los excesos, la falta de rigor y la mala gestión.

2/ De  esa manera, a traves de los años y los gobiernos, el Estado, que debería estar al servicio de la sociedad, termina obligando a la sociedad, a los ciudadanos, a los contribuyentes, a cargar sobre sus hombros todo el peso de un Estado sobredimensionado, ineficiente, irresponsable y voraz. Deberíamos cambiar. Pero ningún partido se hace cargo. No les conviene a los fines clientelísticos. 

3/ 99 diputados, no son muchos? Algunos, por lo que se ve, muy poco aportan al acervo legislativo nacional. No sería mas eficiente y mas responsable ante la ciudadanía una cámara de representantes integrada por tan solo 45 diputados, por ejemplo? Y sin duda menos costosa al erario público. Difícil, si no imposible de lograr.

4/ Son necesarios 300.000 funcionarios públicos? Me parece que no. Creo que cien mil menos harían mas eficiente al Estado. Se ha llegado a esa cifra como resultado del clientelismo practicado por todos los partidos políticos, cada uno en su tiempo. Esto es, ingresar a la Administración a personas de su mismo cintillo partidario, tanto para pagar favores como para sellar lealtades. Todo un flagelo, cuyas consecuencias han sido y son nefastas.

5/ Para terminar estas muy breves y seguramente incompletas reflexiones, dejamos planteada la idea de reducir el numero de 19 departamentos (con 19intendentes, 19 juntas departamentales, cada una con 31 ediles) en los que se divide actualmente (porque no siempre fue así) la República. Un proyecto frustrado de crear 4 regiones, con 4 intendentes y 4 juntas departamentales, tendría por consecuencia una drástica reducción de intendentes, ediles y funcionarios municipales. Muy probablemente se lograría, de esa forma, reducir enormemente el presupuesto municipal nacional, y el numero de funcionarios, los que podrían ser asignados a tareas más productivas.